Miedo a volar
No sé de dónde nace mi bloqueo.
No sé qué puedo hacer. Nó sé qué me gusta.
Pero puede que me de miedo independizarme.
Hago esta confesión porque necesito un desahogo público.
Puede que sea una de mis pequeñas alucinaciones perceptivas...siento una profunda infelicidad en mis padres...ellos que han trabajado tanto y se han sacrificado tanto por darnos a mi hermano y a mí la mejor educación de la que han sido capaces: clases especiales, música, idiomas...Nosotros que hemos vivido con casi todas las comodidades y hemos sabido del precio de cada cosa...
Siento una vez más esa pared, cada vez que escribo un cuento, una poesía, cada vez que me siento a improvisar o componer en el piano, cada vez que un proyecto nuevo aflora en mi mente...una pared que casi parece sólida impide que la exteriorice. Una losa cae sobre mí.
Es como un qué importa nada...es un para qué sirve todo esto....una empresa más...un proyecto más...sobreactuación sobre sobreactuación....demasiado movimiento...vivimos en una sociedad sobreestimulada, superexcitada....no....no....no puedo ser yo otro centro de gravedad...otro centro de atención...
y se me paraliza todo....recojo a mis hijos no nacidos y los ahogo en los ácidos de mi estómago...hacia abajo hacia abajo....corriendo a través de los intestinos....abajo abajo...va, cágalo ya y déjate de gilipolleces...vuelve a la realidad...
y cuál es mi realidad????
P.E. Hasta la próxima....si es que hay próxima vez.
Gracias a todos los que me leyeron alguna vez.
No sé qué puedo hacer. Nó sé qué me gusta.
Pero puede que me de miedo independizarme.
Hago esta confesión porque necesito un desahogo público.
Puede que sea una de mis pequeñas alucinaciones perceptivas...siento una profunda infelicidad en mis padres...ellos que han trabajado tanto y se han sacrificado tanto por darnos a mi hermano y a mí la mejor educación de la que han sido capaces: clases especiales, música, idiomas...Nosotros que hemos vivido con casi todas las comodidades y hemos sabido del precio de cada cosa...
Siento una vez más esa pared, cada vez que escribo un cuento, una poesía, cada vez que me siento a improvisar o componer en el piano, cada vez que un proyecto nuevo aflora en mi mente...una pared que casi parece sólida impide que la exteriorice. Una losa cae sobre mí.
Es como un qué importa nada...es un para qué sirve todo esto....una empresa más...un proyecto más...sobreactuación sobre sobreactuación....demasiado movimiento...vivimos en una sociedad sobreestimulada, superexcitada....no....no....no puedo ser yo otro centro de gravedad...otro centro de atención...
y se me paraliza todo....recojo a mis hijos no nacidos y los ahogo en los ácidos de mi estómago...hacia abajo hacia abajo....corriendo a través de los intestinos....abajo abajo...va, cágalo ya y déjate de gilipolleces...vuelve a la realidad...
y cuál es mi realidad????
P.E. Hasta la próxima....si es que hay próxima vez.
Gracias a todos los que me leyeron alguna vez.